En el mundo de lo oculto, una misa negra consiste en una serie de sesiones espiritistas que sirven para adorar a Satanás, invocar espíritus inmundos, o para tratar de entablar una conexión con un alma de un pariente o amigo cercano.
Son actos litúrgicos cargados de malignidad, obscenidad, blasfemias en honor al Príncipe de las tinieblas.
Para estos rituales, se hacen de forma ilegal de instrumentos litúrgicos católicos y de la Sagrada Hostia consagrada para blasfemar sobre ella. suelen siempre estar acompañados de orgías sexuales.
la Iglesia católica desde siempre, y más ahora, ha condenado todos estos actos de invocación y adoración al diablo, por ejemplo, en el Decreto del Santo Oficio del 4 de agosto de 1865 declaró ilícita, hereje y escandalosa la práctica de evocar a los muertos o espíritus inmundos.
Incluso el Santo Oficio del 24 de abril del 2017 decía que es es ilícito solicitar la intervención de un medium, sirviéndose o no del hipnotismo, asistir a alguna sesión espiritista, consultar a las almas y espíritus, ya sea escuchando las respuestas o solo mirando.
La iglesia cuida de nuestras almas. intervenir en estas actividades, conlleva riesgos de abrir puertas al maligno y sus subsecuentes consecuencias
