El Ozempic, originalmente un medicamento para tratar la diabetes, tiene una gran demanda en todo el mundo, con celebridades y usuarios de las redes sociales que lo promocionan como un medicamento milagroso para perder peso. Ahora el frenesí se extiende por China, donde la delgadez es un estándar de belleza imperante, lo que ha provocado escasez de ese medicamento en el país.
Las redes sociales chinas, como Douyin y Xiaohongshu, se han inundado de mensajes de usuarios que presumen de haber perdido fácilmente cinco o más kilos en un mes con unas pocas inyecciones de Ozempic, que es el nombre comercial de la semaglutida.
“Se trata de un medicamento milagroso”, según una popular serie de publicaciones en Xiaohongshu, una aplicación social china similar a Instagram. “Sin dieta ni ejercicio, puede reducir peso incluso estando tumbado”.