Hasta ahora, la pena por el delito de feminicidio oscilaba entre los 12 y los 30 años de prisión, dependiendo de las circunstancias del caso.
Ahora, la ley amplía esta pena hasta 40 años de prisión.
El texto fue aprobado en septiembre en la Cámara de Diputados, de forma simbólica.
De la autoría de la senadora Margareth Buzetti, el proyecto de ley transforma el feminicidio en un delito penal independiente, en lugar de mantenerlo como delito calificado de homicidio.
La medida aumenta la pena, eleva el perfil del delito y pretende reducir el subregistro de casos.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sancionó hoy la ley que aumenta la pena por feminicidio hasta 40 años y que también prohíbe a los autores de crímenes contra las mujeres ocupar cargos públicos.
La simbólica firma de la ley se realizó en un evento en el Palacio presidencial de Planalto, a la que asistieron ministros como Cida Gonçalves (Asuntos de la Mujer), Jorge Messias (Abogacía General de la Unión) y Alexandre Padilha (Relaciones Institucionales).