La familia del can responsabiliza a la empresa Copetran, que cubría la ruta entre Maicao y Medellín.
Gabriela Nava, dueña del perrito, relató que cuando compraron los pasajes informaron que viajaban con su mascota y que estaban dispuestos a pagar un valor adicional si era necesario. En el viaje de ida, Maxi viajó sin inconvenientes junto a su familia en la cabina del bus. Sin embargo, al regresar, el conductor se opuso rotundamente.
“Nos dijo que los perros viajaban en el maletero, que no era ni el primero ni el último. No quiso escuchar razones”, recordó Gabriela.
Durante las primeras dos horas del viaje, Maxi fue revisado en una parada y parecía estar en buen estado. Le dieron agua y el animal mostraba signos de tranquilidad. Sin embargo, dos horas y media después, todo cambió. En una nueva parada, una pasajera alertó que el perrito “se estaba muriendo”.
Lo que debía ser el regreso a casa después de unas vacaciones familiares, se transformó en una tragedia que ha indignado a decenas de personas en redes sociales. Maxi, un cachorro de raza pequeña y apenas un año y medio de edad, murió por asfixia tras permanecer cinco horas encerrado en el maletero de un autobús.
Fuente: el telégrafo