Esta crisis energética afecta de distinta forma a los países de la región y los expertos marcan un patrón que agrava la situación: el impacto de la crisis climática.
En los últimos meses se han registrado cortes de energía eléctrica en Ecuador por la falta de lluvias en las zonas donde están ubicadas las centrales hidroeléctricas. En otros países como Cuba, la suspensión es hasta 20 horas debido a la obsolescencia de su infraestructura.
En la nación caribeña solo el 16% de los habitantes tienen electricidad y la otra mitad están completamente a oscuras. A eso deben sumarle los embates de la tormenta tropical Óscar que trajo consigo fuertes llevas y vientos de hasta 110 kilómetros por hora.
Latinoamérica padece una crisis energética marcada por la sequía, falta de lluvias y colapso de los sistemas hídricos en varios países.
En Venezuela, los apagones suelen ser constantes por el colapso del sistema eléctrico hace más de 15 años.