La actividad minera no es nueva en el lugar, pues hay una mina en etapa de cierre, doce concesiones en exploración y ocho más solicitadas, que abarcarían en total unas 20.000 hectáreas, pero la consulta popular convocada para el próximo 20 de agosto ha dividido a sus habitantes.
Una parte de la población y grupos ecologistas piden votar «Sí» para frenar la expansión minera y preservar el medio ambiente, pero quienes respaldan el «No» aseguran que una minería responsable cuidaría la naturaleza y apoyaría a los más necesitados.
Extendida sobre 124.296 hectáreas, la Mancomunidad del Chocó Andino (con algo más de 18.000 habitantes), está compuesta por las localidades de Calacalí, Gualea, Nanegal, Nanegalito, Nono y Pacto, que forman parte de las once que integran la reserva de la biosfera, de 287.000 hectáreas.
«Más oportunidades de vida”
Para Marilex García, paramédico nativa de Pacto, la más poblada con unos 5.000 habitantes, su parroquia es una de las «más lindas», pero lamenta que no haya desarrollo, «ni por parte del turismo ni tampoco dejan que entren otras empresas», y los ambientalistas han provocado «pelea y división».
García aspira a que todos en su pueblo tengan «más oportunidades de vida: sueldo digno, trabajo estable».