El aumento desproporcionado del área quemada en 2024, principalmente en áreas de bosque, es una señal de alerta sobre la necesidad de controlar el uso del fuego, además de reducir la deforestación, señaló la coordinadora del Monitor del Fuego de MapBiomas, Ane Alencar, citada por la prensa local.
Los datos muestran que el 57 por ciento del área quemada en Brasil en los primeros 11 meses del año está en la Amazonia, donde 16,9 millones de hectáreas fueron afectadas por el fuego, incluidas 7,6 millones de hectáreas de bosques, entre ellos bosques inundables.
La superficie quemada en Brasil entre enero y noviembre de 2024 casi se duplicó con respecto del mismo periodo del año pasado y alcanzó la mayor extensión en seis años, con 29,7 millones de hectáreas afectadas, según un estudio divulgado hoy lunes por la red colaborativa MapBiomas.