Su representante informó la noticia a Deadline, aunque aún no se han revelado las causas de su deceso.
Todd se destacó en el género de terror con su interpretación en Candyman, donde dio vida al espíritu vengativo del pintor Daniel Robitaille, y en la saga Destino Final, donde su papel como un enigmático forense anticipaba la llegada de la muerte.
La carrera de Todd comenzó en el cine en 1986 con Platoon de Oliver Stone, y su imponente presencia —con una altura de 1.96 metros y una voz profunda— lo llevó a destacarse rápidamente en papeles significativos en el género de terror.
Tras su participación en Night of the Living Dead en 1990, consolidó su imagen como uno de los actores más reconocidos en películas de horror.
Además de Candyman, trabajó en títulos como The Crow, Wishmaster y Hatchet, dejando un legado en el cine de terror hasta su última aparición en Hell Fest y los filmes Werewolf Game y Stream, previstos para estrenarse este año.
Además de su trayectoria en el cine, Todd tuvo una presencia en la televisión y los videojuegos.
Tony Todd, célebre actor estadounidense reconocido por sus icónicos papeles en películas de terror, falleció en su residencia en Los Ángeles a los 69 años.