El levantamiento del secreto es una demanda histórica de los familiares de las víctimas del régimen del general Augusto Pinochet y busca facilitar el trabajo de los funcionarios que llevarán a cabo el plan nacional de búsqueda de detenidos desaparecidos anunciado la semana pasada por el Gobierno.
«La finalidad es poder cumplir con uno de los objetivos del plan, trazar las trayectorias de cada una de las personas detenidas y hechas desaparecer», dijo el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero.
Es la primera vez que el Estado asume la búsqueda de los 1.469 detenidos desaparecidos que dejó la dictadura.