Los padres llevaron el caso a la Cámara Nacional de Apelaciones de lo Civil, pero también fue rechazada su petición.
En el entorno familiar, de todas maneras, el niño es llamado Lucifer y no lo consideran como una burla.
Esta no es la primera vez que una pareja decide poner ese nombre a su hijo. En 2020, en Reino Unido, sí fue inscrito el niño. Su padre decía que Lucifer en griego significa ‘portador de luz’.
El Registro Civil de Argentina no aceptó la inscripción del nombre Lucifer para un niño.
Según el director de la entidad, Facundo Bargalló, ese nombre hace referencia al diablo y no es aceptable para un niño.