[responsivevoice_button voice=”Spanish Latin American Female” buttontext=”Pulsa para escuchar”]
Frenar el envejecimiento ha sido, desde el principio de los tiempos, una obsesión para el ser humano y, para las marcas cosméticas, su mayor desafío.
El estrés, las enfermedades, el sol, la contaminación y, por supuesto, la oxidación de nuestro propio cuerpo, son factores que favorecen el envejecimiento. Sin embargo,
Sin embargo, el Daily Mail ofrecía en un reportaje una serie de datos -ya recogidos y publicados por este periódico-, según los cuales en 2015, el mundo albergaba a más de 450.000 centenarios, más del cuádruple que en 1990. Y sugieren que habrá 3,7 millones de personas centenarias en todo el mundo en 2050. ¿Cómo es esto posible?
Cada vez somos más, eso es un hecho. Según la INE: “El total de personas inscritas en el Padrón Continuo en España a 1 de enero de 2022 es de 47.435.597 habitantes, según el Avance de la Estadística del Padrón Continuo. Esta cifra supone un aumento de 50.490 personas (un +0,1%) respecto a los datos a 1 de enero de 2021”.
El estrés y la contaminación como factor de envejecimiento
El estrés no es otra cosa que la reacción del cuerpo a un desafío o demanda. Aprender a gestionar el estrés es fundamental.
“En pequeños episodios el estrés puede ser positivo, como cuando ayuda a evitar el peligro o cumplir con una fecha límite. Pero cuando el estrés dura mucho tiempo, puede dañar su salud”, advierten desde la Biblioteca de Medicina MedlinePlus.
Algunos de los efectos del estrés mal gestionado es una presión arterial alta, insuficiencia cardíaca, diabetes, obesidad, depresión o ansiedad, y problemas de la piel, como acné o eczemas. Todos ellos favorecen el envejecimiento.
Se estima que en 2019 la contaminación del aire ambiente (exterior) provocó en todo el mundo 4,2 millones de muertes prematuras, según la OCU. Así que, cumplir las políticas para reducir la contaminación (no solo por parte de las instituciones) es fundamental.
Cuanto más ‘puro’ sea el aire, mejor para evitar enfermedades respiratorias —entre otras—, y prevenir el envejecimiento.
Echarse la siesta no parece mala opción: se mantiene el estrés a raya, lo que provoca un sistema inmune fuerte y —además— no contamina.
Los antioxidantes están de moda
La vitamina K se ha puesto de moda. Y es que la alimentación -como en todo- también influye en el envejecimiento. Aumentar la ingesta de vitamina K ayuda con la reducción de la osteoporosis y la calcificación de los vasos y podemos encontrarla en los vegetales verdes: espinacas, acelgas, col rizada, etc.
Según el estudio Antioxidantes: perspectiva actual para la salud humana, los otros productos con antioxidantes son:
Vitamina E: aguacate, aceite de oliva, arroz integral, frutos secosVitamina C: acelgas, tomates (licopeno), todos los cítricos (limón, naranja, mandarina), además kiwi, fresa, guayaba… Con p-caroteno: zanahoria, espinacas, mango, melón; Con flavonoides: té verde, vino, manzana, o peras.
Además, hay antioxidantes en condimentos y bebidas como: el ajo, cebolla, ginseng, ginko, avena, hierbabuena, menta, albaca, etc.
Envejecimiento psicológico
Una buena salud mental es fundamental para el buen envejecimiento. Un objetivo en la vida, eso es lo que hay que tener. Que tu vida tenga sentido y tú te sientas útil es la mejor forma de sentirse bien contigo mismo y, por lo tanto, también tu cuerpo.
No hay que pensar que estás envejeciendo, de hecho, es peor. Según el estudio Personal Understanding of Life and Social Experiences (PULSE) de la OSU, el hecho de pensar que estás envejeciendo acaba afectando de forma importante a tu salud física.
Un equipo internacional de investigadores estadounidenses y chinos liderados por Deep Longevity hicieron un estudio, —publicado en la revista Aging-US— según el cual concluyen que estar solo y no ser feliz acelera el envejecimiento más que fumar.
Cuidarse y hacer ejercicio
El retinol es un acelerador de la regeneración celular y un productor de colágeno para tratar signos del envejecimiento, la textura y calidad de la piel y el aspecto de los poros.
“Los rayos UVA son responsables del bronceado y también de las arrugas y otros signos de envejecimiento prematuro, mientras que los rayos UVB causan quemaduras solares y cáncer de piel. Los rayos UVA pueden atravesar las nubes y el cristal y están presentes todo el año, de manera que se recomienda utilizar protección solar diariamente”, advierten desde el equipo de Eucerin.
Además del cuidado facial, es imprescindible tener a mano siempre una leche hidratante y reafirmante para el resto del cuerpo y un buen protector solar para combatir los rayos UVA del sol que provocan el envejecimiento prematuro de la piel.
El retinol para cuidar la piel. ¿Y para cuidar la mente? Los amigos. Las relaciones personales ayudan a prevenir la soledad y, además, si te ayudan a acabar con la pereza para hacer ejercicio físico como caminar, nadar o yoga, por ejemplo, mejor que mejor.
El factor genético
Como diría Pau Donés, “todo depende”. Y es que el factor genético también es un condicionante en el envejecimiento tardío y el único que (de momento) no podemos controlar. De hecho, ya hay estudios que señalan las áreas territoriales de España donde la gente vive más años: las llamadas Zonas Azules, áreas del mundo donde las personas viven vidas más largas, llegando constantemente a los 100 años.
A pesar de los avances recientes en biología molecular y genética, los misterios que controlan la vida humana permanecen inciertos. Falta mucho por entender acerca del proceso de envejecimiento: “Actualmente se ve el envejecimiento como uno de los procesos biológicos más complejos que además es multifactorial y conduce a la vulnerabilidad y a la fragilidad creciente, y hasta la fecha, al menos en humanos, no se detiene ni se revierte”, sostiene el estudio Envejecimiento: algunas teorías y consideraciones genéticas, epigenéticas y ambientales.
Referencias
Marta Coronado H. Salvador Vega y León Rey Gutiérrez T. Marcela Vázquez F. Claudia Radilla V. Antioxidants: present perspective for the human health. http://dx.doi.org/10.4067/S0717-75182015000200014
María Guadalupe Rico-Rosillo, Diego Oliva-Rico, y Gloria Bertha Vega-Robledo. Envejecimiento: algunas teorías y consideraciones genéticas, epigenéticas y ambientales. Facultad de Medicina- Rev Med Inst Mex Seguro Soc. 2018;56(3):287-94
Fotoenvejecimiento – Y cómo prevenirlo. Consultado: https://www.eucerin.es/problemas-de-la-piel/proteccion-solar/photoaging el 04/04/2023
Fedor Galkin, Kirill Kochetov, Diana Koldasbayeva, Manuel faria, Helene H. Fung, Amber X. Chen, Alex Zhavoronkov. Psychological factors substantially contribute to biological aging: evidence from the aging rate in Chinese older adults. Aging-Us (2022). Consultado online en https://www.aging-us.com/article/204264/pdf el 04/04/2023
Biblioteca de Medicina (EE. UU.) El estrés y su salud. Publicado en MedlinePlus en español. Versión en inglés revisada por: Fred K. Berger, MD. Última revisión 30/4/2022 Disponible: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003211.htm Consultado el 03/04/2023