Threads, la red social de mensajería con la que Meta pretende hacer la competencia a Twitter, arrancó este miércoles con problemas de descarga después de que la empresa tecnológica dirigida por Mark Zuckerberg adelantara su lanzamiento, inicialmente previsto para mañana.
A las 23.00 GMT de este miércoles concluyó la cuenta atrás para la descarga de Threads, publicitada en una página web junto a un código QR, aunque se trata de una llegada al mercado con dos grandes excepciones: no tienen acceso los países de la Unión Europea ni los teléfonos Android.
En los primeros minutos de disponibilidad en la App Store de Apple, muchas personas intentaron descargar la aplicación sin éxito y acudieron precisamente a Twitter para quejarse de ello, mientras que otras compartían capturas de pantalla mostrando sus nuevos perfiles en Threads.
Ayer se conoció la intención de Meta -propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp- de lanzar esta nueva red social que llevaba tiempo en desarrollo y cuya presentación parece haberse acelerado como respuesta a la restricciones de Twitter a la lectura de mensajes diarios y a los contenidos en abierto.
La aplicación se presenta como “una app de Instagram” para la “conversación” y su funcionamiento está vinculado a la red social de las fotos, ya que se mantiene el nombre de usuario, se puede seguir a las mismas personas y elegir quién puede contestar a los mensajes.
Adam Mosseri, el responsable de Instagram, dijo en un primer mensaje en Threads que ya tiene “las puertas abiertas”, aunque reconoció que le llevará “un tiempo para propagarse”, y dijo esperar que se convierta en una “plataforma abierta y amigable”.
Según indicó al medio The Verge, está disponible en 100 países, excluyendo los europeos “por las complejidades con el cumplimiento de algunas leyes que entrarán en efecto en el próximo año”, presumiblemente sobre la competitividad de las empresas digitales.
Apodada por los medios estadounidenses como “Twitter killer” (asesino de Twitter), Threads dispara a la red del pajarito desde su mismo nombre, puesto que esa palabra en inglés significa “hilos” y forma parte de su vocabulario propio, además de sonar como “threats” (amenazas).
Su interfaz también es muy similar a la de Twitter, pero más simple: los mensajes se agrupan en dos pestañas, una llamada “hilos” (como la de Tweets) y otra “respuestas”, y los mensajes pueden recibir corazones, comentarios y reenvíos (como los retuits), además de ser compartidos.
En ese sentido, el jefe de Instagram dijo en la entrevista que “Twitter fue un pionero del espacio” pero “dado todo lo que está pasando”, la empresa ha visto “una oportunidad para construir algo que fuera abierto y bueno para la comunidad que ya estaba usando” la red social de las fotos.
Fue una referencia velada a los vaivenes que vive Twitter desde que el multimillonario Elon Musk compró la red social el año pasado, ya que ha impuesto distintas fórmulas para intentar rentabilizarla, como cobrar por las cuentas verificadas, y ahora, limitar su uso diario para combatir a los “bots”.
El confundador de Twitter, Jack Dorsey, y Musk, por separado, ayer alertaron sobre los problemas de privacidad de Threads, que recolectará todo tipo de datos de los usuarios, incluyendo identidad, salud y forma física, finanzas, contactos o “información sensible”.