El grupo de economías emergentes BRICS se refuerza con de la incorporación de seis nuevos miembros, entre ellos los principales socios de India en el Golfo y el norte de África.
El presidente de Sudáfrica Cyril Ramaphosa, anunció durante la clausura de la XV cumbre de los BRICS en Johannesburgo la expansión del grupo; motivo por el cual se extiende la invitación a Argentina, Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos a convertirse en miembros de pleno derecho del BRICS a partir del 1 de enero de 2024.
En la reciente cumbre, los líderes de los BRICS encomendaron a sus ministros de Economía y a los gobernadores de los bancos centrales de sus países, estudiar el asunto de las monedas locales, instrumentos y plataformas de pago e informar periódicamente los avances de un grupo que comienza un nuevo camino de expansión.
Todos estos movimientos tienen impactos regionales de amplio alcance, hasta hace muy poco sauditas e iraníes no tenían relaciones diplomáticas plenas, lo que se subsanó mediante acuerdos propiciados por los chinos. En África, el impacto se da por la integración de Egipto al norte y Etiopía en el centro del continente. En el caso de América Latina, la integración de Argentina refuerza el poder del Mercosur.
Este colectivo se ha autoerigido parcialmente en representante de lo que se empieza a llamar el Nuevo Sur Global, es decir, los países menos ricos del mundo, menos representados en instituciones internacionales y más vulnerables ante diversos flagelos mundiales. Son los herederos del Movimiento de Países No Alineados, del Grupo de los 77 en la ONU o de las naciones del sur que se reunían y confrontaban con las del norte en múltiples encuentros.
En todo este tiempo los países fundadores han estrechado sus relaciones a todos los niveles, han ganado peso en el mundo, en términos económicos y de influencia; aunque, también es cierto que el mercado interno ha seguido siendo el principal motor de su crecimiento y no han logrado integrarse en las cadenas de valor globales al mismo nivel de sus competidores occidentales.
La agenda de desarrollo económico del grupo se sustenta en el comercio internacional, en un momento en que Europa y Estados Unidos hablan más bien de autonomía estratégica abierta con control sobre las importaciones. Igualmente, existe un interés en el clima, salud y carrera espacial, sin apenas mención a los modelos de desarrollo económico, con la única excepción a la necesidad de no utilizar la política climática como una barrera comercial encubierta.
De interés: El propósito de este grupo es mantenerse al margen de los dos grandes bloques rivales, el norteamericano y el soviético, con el fin de no entrar en la competencia entre las grandes potencias.
